¿Cuánto tiempo podemos vivir sin agua?

• Sudoración: el calor y la humedad llevan a la pérdida de líquidos a través de la sudoración. Este punto va relacionado con el anterior, ya que en verano aumenta la cantidad de sudor y con ello necesitaremos beber más agua. La pérdida de agua por sudoración también dependerá del nivel de actividad física de cada persona.

• Altitud: Es más difícil aguantar sin beber agua en una montaña que en un terreno sin elevaciones. Debido al nivel de altitud, es decir cuanto más arriba sobre el nivel del mar nos encontremos, orinamos más y respiramos más rápido, por lo cual perdemos líquido más rápidamente provocando que nuestro organismo necesito más cantidad de agua.

• Edad: Los niños y ancianos son mucho más vulnerables a la deshidratación que una persona adulta. En el caso del niño, su cuerpo lleva un proceso más acelerado de las funciones vitales y eso conlleva a que su organismo requiera una mayor cantidad de agua. En el caso de los ancianos, debido a los cambios fisiológicos, pierden agua con mucha más facilidad por lo que también necesitan beber en mayor cantidad para vivir.
• Enfermedades:En general, toda enfermedad implica una mayor pérdida de líquidos. La fiebre, los vómitos y la diarrea son los cuadros que más contribuyen a la deshidratación. En estos casos es importante beber agua sin contaminantes de forma constante siempre con las recomendaciones de un médico.

Los españoles no nos hidratamos bien

Según el Estudio de Hábitos de Hidratación de la Población Española, 9 de cada 10 personas promedio, no se hidratan adecuadamente.

Alrededor del 70% del cuerpo humano es agua y el resto músculos. Lo que muchos ignoran es que si niveles de agua descienden tan solo en un 1%, entramos en riesgo de causar problemas de problemas de deshidratación, entre los más comunes están dolores musculares, fatiga, y depresión. Sin embargo, una deshidratación severa puede causar problemas crónicos e incluso la muerte.

En este artículo hemos aprendido la importancia vital de tomar agua potable constantemente, ya que sin ella el tiempo promedio de supervivencia de un adulto es de tres a cinco días únicamente. En el caso de los niños y adultos mayores, la ingesta de agua debe ser aún más contralada ya que son más vulnerables a sufrir deshidratación.